La Farsa de la Policía Porteña: ¿¿ Por qué NO la cerramos hasta que alguien sepa para que sirve ???
Por Aníbal Gotelli (Especial para Revista “Mi Barrio” y “La Red de Medios Barriales” de la Ciudad de Buenos Aires).
Presidente del Instituto para Pensar Buenos Aires (IpeBA)
www.pensandobuenosaires.blogspot.com
www.actiweb.es/pensandobuenosaires
Los hechos sucedidos hace algunas horas en el Hospital Santojanni (Hospital de la Ciudad, por cierto) entre barras bravas que se castigaron entre si con bárbara crudeza y leyendo las declaraciones de la menos lúcida María Eugenia Vidal (a quien el cargo, a un mes de asumir) ya le está quedando sumamente grande, vuelvo a hacerme la misma pregunta respecto de la Policía Porteña que ya me vengo haciendo desde mucho antes de su creación:
Es decir, si no sirve para cuidar hospitales, si no sirve para cuidar colegios, si no sirve para cuidar la calle, si no sirve para cuidar bancos, si no sirve para prevenir el delito, si no sirve para reducir delincuentes, si no sirve para nada de nada… ¿para qué sirve?.
¿De qué sirve esta caricatura de Policía, de Metropol liberal, esta especie de Armada Brancaleone de Mauricio Macri?. De nada, por cierto que de nada.
Atención porteños:
Si Macri finalmente creó la Policía Porteña con presupuesto de la Ciudad , ¿Por qué no aceptó el traspaso de la Policía Federal sin presupuesto tal cual se lo ofrecía el Gobierno Nacional?.
La respuesta es obvia: quiere presentarse como víctima, victimizarse y plantarse como opositor permanente del Gobierno Nacional, para ver si gana un voto más para las próximas elecciones.
Alguien tendría que avisarle a Macri que la campaña ya terminó y que tiene que empezar a gobernar la Ciudad con organización, con método, con dedicación y con seriedad.
Todos sabemos que Macri no es un estadista.
Es tan sólo un “bon vivant”, un chico al que todo le fue dado y al que todo le fue fácil y concedido al menor capricho.
Pero no nos dejemos engañar:
Macri no es tan sólo un indolente sin organización, ni método, ni convicción, ni formación política.
Macri, con esta acción de crear una Policía Propia, muestra y demuestra que, de acuerdo con su ideología neoliberal, necesita una fuerza de hombres bien pagos por él y que obedezcan sólo a él como mercenarios, pero no tan sólo para acabar con el delito porteño, sino para tener una fuerza de represión a su discreción y voluntad.
La Policía Federal, pasada a la jurisdicción porteña, no iba a ponerse incondicionalmente a su servicio para reprimir a cartoneros, piqueteros, manifestantes, descontentos, artesanos, docentes y porteños en general.
Necesita una fuerza policial propia, pero de él y para él.
No bajemos la guardia.
Mantengámonos en alerta.
Se está formando un cuerpo armado represivo y ese cuerpo represivo será manejado a su antojo por el neoliberalismo residual.
El actual jefe de gobierno de la Ciudad de Buenos Aires, Mauricio Macri, es como uno de esos príncipes italianos del Renacimiento ennoblecidos por el dinero, como los Medicis o los Borgia, que con el dinero lo compraron todo.
No nos olvidemos que Macri es un millonario de segunda, que podrá casar por dinero un hijo suyo con una niña de la alta aristocracia nacional patricia y originaria, pero nunca será legítimamente uno más de la alta aristocracia nacional patricia y originaria.
Entonces tiene que comprarlo y tenerlo todo para ganarse el respeto y la obediencia de sus compañeros de clase.
Ahora tiene una ciudad, y como todo condotiero del Renacimiento, ahora quiere un ejército propio, para él y dirigido por él para su propio beneficio.
Que no se engañe nadie.
La inseguridad no le afecta porque él vive en una realidad personal infinitamente segura.
Los Macri cumplieron el proceso de ennoblecimiento de algunos duques sin cuna del Renacimiento italiano (los Borgia, por ejemplo):
Primero: dinero.
Después: territorio.
Tercero: poder.
Cuarto: ejército.
Y como a los Borgia del Renacimiento, a Macri y al neoliberalismo no les importa la inseguridad general sino la seguridad y la supervivencia de su clase.
Lo que presentaron el 17 de marzo (de 2008) no fue un Plan de Seguridad, porque de “plan” no tiene nada.
El pseudo-plan de Seguridad del neoliberalismo residual porteño no habla de:
• Competencia policial.
• Competencia judicial.
• Convivencia entre Policía Federal y Metropolitana.
• Despliegue territorial.
• Entre otras muchas cosas de las que no habla.
No nos engañemos.
El “Plan de Seguridad” del Macrismo no es ni plan ni dará Seguridad ni a los porteños ni a nadie, porque su objetivo no es dar Seguridad a los porteños.
La creación de una fuerza policial metropolitana, discoordinada y superpuesta en funciones y competencia con la Federal no contribuye a dar mayor Seguridad sino a dar mayor profundidad al caos.
El de Macri no es un Plan de Seguridad, sino un plan de distracción.
Mientras hablamos todos de la creación de la Policía Metropolitana , el neoliberalismo se dedicará como siempre al saqueo, y cuando la sociedad se quiera quejar del saqueo, el neoliberalismo tendrá su propia policía para callar las protestas de los rebeldes, los quejosos y los insumisos.
Tener Policía propia, por sí mismo, no garantiza nada.
No nos desviemos del camino verdadero. El objetivo es la Seguridad , pero no a cualquier precio y con cualquier costo.
No facilitemos la creación de la policía política del neoliberalismo residual porteño.
Como hubiera dicho Brecht: cuando nos esté reprimiendo la Metropol no nos quejemos, porque ya va a ser demasiado tarde.
Cantidad de Caracteres 5589