Gran rechazo de los vecinos a los actuales Jefes Comunales
Los vecinos de la Ciudad de Buenos Aires desaprueban el desempeño de los Presidentes de las 15 Juntas Comunales. Esta es la conclusión de una votación digital de parabuenosaires.com donde participaron 932 vecinos.
Allí el 35 por ciento de los votos tildan de “Muy mala” a la gestión de los Presidentes de Junta. Para peor, en segundo lugar está la valoración “Mala” con el 23,5 por ciento. En tercer lugar está “buena” con el 11,1 por ciento. Luego viene “Regular” con 10,1% y “Muy buena” con 10,1 por ciento, que comparte el último lugar con “Excelente”.
El mejor indicador para contrastar estos números es la línea telefónica 147, creada y difundida por la actual gestión. Allí, según datos de 2014, el arbolado recibió 37 mil denuncias, alumbrado 54 mil, el bacheo 11 mil y veredas más de 16 mil.
Se concluye así que aún quedan aspectos por fortalecer en las Comunas, en su operatividad y acción directa sobre sus competencias exclusivas. Si bien es cierto que en los barrios de la Ciudad se percibe el nivel de obra pública en calles, plazas y paseos, las obras de gran envergadura corren por cuenta del poder central, los arreglos locales de las Comunas y es allí donde muchos vecinos muestran su malestar. Temas como la recolección de basura son temas del Ejecutivo porteño, pero lo que respecta a veredas, poda y baches menores va por cuenta de las Comunas.
Sin embargo, el Jefe de Gabinete, Horacio Rodríguez Larreta, pone a casi la mitad de los actuales funcionarios en las boletas para darles reelección, a pesar del rechazo vecinal a su gestión.
Estos son los presidentes que buscan renovación: Facundo Carrillo en la Comuna 2 (Recoleta), Jorge Apredaen la 4, en la 5 con Marcelo Bouzas (también ex director del CGPC), Guillermo Peña en la 7, Eva Ferraro en la Comuna 8, Carlos Guzzini en la 11 y Maximiliano Corach en la 14 (Palermo).
Sus nombres pueden sonar poco conocidos, aún menos sus rostros, pero han sido estos cuatro años los responsables de las obras que más influyen en la vida cotidiana de los porteños.
A nivel político, más que tomarse como una apuesta por su trabajo, se entiende como un premio consuelo, ya que la expectativa de muchos presidentes era poder acceder a un escaño en la Legislatura porteña.
La carrera política de muchos Presidentes, con este gesto de Larreta, parece que puede llegar hasta donde hoy están, y eso ya genera varios resquemores entre quienes quieren hacer carrera gubernamental. También están quienes no aspiran a más y sí lo toman como un premio: un buen cargo con bajo perfil y herramientas de gestión.
Si bien muchos cuentan con sus propios hitos de gestión —Bouzas emplazó la Sede Comunal 5 en Plaza Boedo y Carrillo abrió una Sub Sede en un Shopping frente al cementerio Ahora, entre otros—, van a tener que doblar la apuesta y cumplir con aquellos tópicos que les quedaron en el tintero durante esta primera camada. Desde los Consejos Consultivos hay propuestas que ni siquiera fueron atendidas desde las Juntas. A lo que hay que sumar situaciones como autos abandonados en las calles, operativos en conjunto con el BAPpara reubicar y dar atención a gente en situación de calle que lo que sólo hace es cambiar de barrio, entre otras problemáticas que parecen no tener fin.
También a nivel político, muchos comuneros del PRO que han decidido alistarse en las filas del Michettismo para renovar su cargo en las Juntas o para aspirar a la presidencia. Esta tensión política tendrá su desenlace en las PASO.
Sin embargo, en los barrios de la Ciudad aún queda mucho camino para que se institucionalicen con peso propio las Comunas debido a la gran demanda de los vecinos en los problemas cotidianos, es decir, las competencias exclusivas comunales.
Luis Alberto Serres
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