Seguridad vial: son 400 las academias de manejo “truchas” en Buenos Aires
Las redes sociales y algunas páginas web son la plataforma perfecta para que muchas personas ofrezcan sus servicios como instructores de manejo. Según estimaciones de la asociación que agrupa a las escuelas oficiales, son 400 las academias “truchas”. Muchísimas más que las apena 25 que operan en el ámbito porteño y que están habilitadas por la Ciudad. Los expertos en seguridad vial advierten sobre la problemática de contratar instructores no profesionales: cuestionan la formación con la que cuentan, los conocimientos que transmiten a nivel de la seguridad vial y la falta de certificado de antecedentes penales.
En relación a los servicios, el conflicto con Uber renovó la polémica sobre las actividades que se promocionan a través de redes sociales, aplicaciones y muchas páginas web, del estilo de Mercado Libre. Estas plataformas hacen de nexo entre los usuarios que buscan un servicio y quienes lo ofrecen, el problema es que en muchos casos dejan de lado las normas y los controles de los estados.
“Más allá de que existe una legislación que regula la actividad, cosa que no es menor, hay un tema importante relacionado con la seguridad de las personas; los alumnos no saben quiénes son los instructores y tampoco si tienen antecedentes penales”, explicaron desde Creando Conciencia, una ONG que se dedica a promover contenidos de educación, prevención y seguridad vial. Por otro lado, se preguntan “cómo están formados esos instructores. Existen conocimientos prácticos, pero también teóricos. El enorme crecimiento de este mercado deja en evidencia que ni a las autoridades ni a la sociedad argentina en su conjunto les interesa la seguridad vial. Y esto es muy preocupante”. El vocero de la ONG advierte que la comodidad no siempre es la mejor opción: “Muchos instructores que se venden en la web promocionan la comodidad. Pasan a buscar a los alumnos por sus casas o por el trabajo, en el horario del almuerzo. Pero la seguridad vial es mucho más importante que la comodidad”, advirtieron.
Según la Secretaría de Tránsito porteña existen 25 academias certificadas. Deben tener un local habilitado como Instituto de Enseñanza; el local queda bajo el control de la Agencia Gubernamental de Control, que chequea que cumpla con todas las normas de seguridad e higiene, seguros y sectores destinados a la recepción y un aula para el dictado del curso teórico. El propietario de la escuela tiene que presentar además certificado de antecedentes penales, constancias impositiva, previsional, tributaria y CUIT. Y en relación a los autos, debe haber un mínimo de dos con doble comando y menos de diez años de antigüedad; certificados de verificación técnica (cada 12 o 6 meses según la antigüedad) y seguros. En tanto, los conductores también tienen que presentar certificados de antecedentes, licencia profesional y tramitar una credencial oficial en la Dirección General de Licencias, entre otros requerimientos.
Desde la Secretaría de Tránsito explicaron que se hace un seguimiento de las escuelas. Sin embargo no opinaron respecto a los servicios privados que se ofrecen en diferentes páginas web. Pero aclararon que los certificados del curso teórico que emiten las escuelas “truchas” no tienen validez ante la Dirección General de Licencias.
“Venimos pidiendo desde hace años que nos den un canal oficial a través del cual podamos acercar nuestras denuncias. Estos instructores no cumplen con ninguna de las normas que dicta la ley y el Estado no interviene. No se hace nada por las academias, que trabajan en regla con enorme esfuerzo, y por los usuarios, que quedan desprotegidos”, dijo a Clarín Omar Bozzari, de la Asociación Academia de Conducir de la Ciudad y propietario de Driver’s School. Según un relevamiento realizado por la asociación, habría alrededor de 400 personas ofreciendo servicios en páginas web.
Luis Alberto Serres
Cantidad de Caracteres 3942