Público pero exclusivo

El Parque Sarmiento, absorbido por la voracidad privatizadora

 

Por Jonatan Baldiviezo  y  María Eva Koutsovitis

La pandemia incrementó la conciencia de la ciudadanía sobre la escasez de espacios verdes públicos en la Ciudad de Buenos Aires. Además fortaleció la consideración de la importancia sanitaria de estos espacios, que también son valiosos por cumplir funciones ambientales, sociales y culturales en la ciudad.

 

Sin embargo, el gobierno porteño continúa con sus viejas mañas de fragmentar los grandes espacios verdes públicos existentes en la ciudad para destinarlos a la explotación privada de forma escalonada, sin debate con la ciudadanía y con la mínima publicidad posible. La inercia política de la voluntad privatista no se ha visto modificada por la fuerza virulenta de una pandemia mundial.

 

Hemos insistido en que estamos viviendo procesos de creación de nuevas desigualdades socio-espaciales en la ciudad, que tienen como eje central la apropiación del entorno ribereño para emprendimientos inmobiliarios suntuosos (por ejemplo, Costa Salguero, el Parque de la Innovación) y para concesiones que tienen por objeto continuar con los polos gastronómicos y los boliches de los ’90 en la Costanera Norte (Distrito Joven).

 

La implementación de la estrategia de fragmentación y privatizaciones parciales acumulativas no sólo se está desarrollando en los sectores ribereños sino también en algunos de los grandes parques públicos de la ciudad. Lo que sucede en el Parque Sarmiento es una muestra ejemplar.

 

 

El parque público que no es de acceso público

 

El Parque Sarmiento se encuentra ubicado en el Barrio de Saavedra (avenida Ricardo Balbín 4750), correspondiente a la Comuna 12. Fue inaugurado en 1981 y ocupa una superficie de 70 hectáreas. En la página del GCBA se informa que esta parque destaca por sus importantes instalaciones deportivas, tales como 4 canchas de fútbol profesional, 2 canchas de fútbol reducido, 2 canchas de pelota paleta, 2 piscinas olímpicas, 2 canchas de handball, 12 canchas de tenis (cemento), cancha de beach volley, cancha de softbol, pista de atletismo, pista de patín roller, pista de BMX freestyle, una bicisenda de 3.000 metros y un circuito aeróbico.

 

De acuerdo al Código Urbanístico (Ley 6099) este predio está destinado a “Urbanización Parque (UP)”, es decir a conformar un área destinada a uso público, parquizada o agreste, cuya característica es el predominio de especies vegetales y suelo absorbente.

 

La Ordenanza 46.229, aprobada en 1993 (actualmente vigente) prohibió al Poder Ejecutivo “otorgar concesión, cesión, transferencia de dominio, tenencia precaria, permiso de uso ni cambio de destino de todo espacio destinado a parque, plazas, plazoletas y de todo otro espacio verde de uso público, se encuentre parquizado, jardinizado o no, perteneciente al dominio público” de la Ciudad de Buenos Aires.

 

En una traducción simple, ambas leyes de forma complementaria ordenan que no se encuentra permitido, a ningún funcionario del Poder Ejecutivo, privatizar espacios verdes de uso público ni mercantilizar su acceso.

A pesar de estas reglas bastantes claras, el ingreso al Parque Sarmiento no es de acceso público porque se debe pagar una entrada general de 80 pesos, de 50 para niñes de 9 a 12 años y 180 para estacionamiento. Para el uso de la pileta se debe pagar 250 o 150 pesos para niñes de 5 a 12 y jubilados/as. Es un parque público para quien tiene la capacidad económica para costear la entrada. En realidad, es un parque estatal exclusivo y mercantilizado en violación flagrante al mandato de que los espacios públicos deben ser de acceso libre y gratuito, como establece la Constitución de la Ciudad y las leyes mencionadas previamente.

 

Pero además, en la última década se incrementaron año tras año los sectores privatizados del Parque Sarmiento:

 

 

• El 16 de abril de 2012, la Dirección General de Concesiones suscribió un Convenio de Permiso de Uso con Omar Galdino Carminatti que tuvo por objeto las 12 canchas de tenis junto con la unidad gastronómica número 2. El canon se estipuló en la suma de 30.000 pesos. El permiso se encuentra vencido desde el 15 de abril de 2015. Actualmente se encuentra en trámite una solicitud de permiso por parte de la Asociación Argentina de Tenis sobre dichos espacios para la creación de un Centro Nacional de Tenis.

 

• El 22 de septiembre de 2017, la Dirección General Administración de Bienes y Concesiones suscribió un Acta de Tenencia Precaria con la Asociación de Ciclismo de Buenos Aires. La tenencia otorgada venció el 21 de septiembre de 2019 y el canon mensual que continúa pagando es de 10.000 pesos.

 

• El 8 de enero de 2019, la Subsecretaría de Deportes, la entonces Dirección General Administración de Bienes y Concesiones y la Asociación Civil IDES (Instituto Deportivo Educativo y Social) suscribieron un Convenio de Permiso de Uso Precario y Oneroso que tuvo por objeto las canchas de fútbol del Parque.

 

IDES y la organización S5B hicieron pública su unión para llevar adelante la explotación de este sector del parque y de las canchas. En la página web de S5B se informa que esta unión se realizó con el fin de desarrollar un emprendimiento deportivo único, con instalaciones de alta calidad para la práctica deportiva de personas de todas las edades, apostando fuertemente al fútbol y a la inclusión en las nuevas generaciones. También se publicita una destacada Academia de Fútbol masculina y femenina, conformada por los más altos profesionales certificados a nivel nacional.

 

El predio otorgado a IDES tiene más de 14.000 metros cuadrados (casi una manzana y media), cuenta con un amplio sector de estacionamiento, canchas de fútbol sintético de 5, 6, 8, 9 y 11 jugadores, canchas de papi futbol, vestuarios de hombres y mujeres, seguridad, un bar restaurante ideado para la realización de eventos, y un sector semicubierto con parrilla. Cuenta, además, con un playón de más de 1.400 metros cuadrados para la realización de eventos y como sector de juegos recreativos.

 

El permiso vence el 7 de enero de 2024 y el canon mensual es de 123.290 pesos, es decir casi 9 pesos por metro cuadrado.

 

Estas organizaciones ofertan para alquiler 8 canchas de fútbol 5 sobre pasto sintético (adaptables a canchas de fútbol 6, 8 y 9), 2 canchas de papi fútbol y 1 cancha de fútbol 11 con medidas profesionales, perfectamente iluminadas y abiertas de lunes a domingo.

En el siguiente cuadro se detallan los valores para alquilar estas canchas. Con sólo alquilar durante cuatro horas las 8 canchas de fútbol 5 y la cancha de fútbol 11, se obtienen los ingresos suficientes para pagar el canon mensual estipulado.

 

 

• El 28 de diciembre de 2020, la Dirección General Concesiones y Permisos, y la empresa IMANA S.R.L. suscribieron un Convenio de Permiso para destinar un sector del parque a la instalación de una carpa de circo para la realización del espectáculo “Circo del Ánima”. La vigencia del permiso, que originalmente había sido fijada hasta el 31 de marzo de 2021, fue prorrogada hasta el 31 de agosto de 2021. El canon mensual fue estipulado en 40.000 pesos. Por Facebook se ofertan las entradas desde 800 pesos. Para el pago del canon resulta suficiente la venta de 50 entradas de las más baratas.



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• El 30 de diciembre de 2020 se otorgó un permiso de uso a la Asociación Civil “Belgrano Athletic Club” sobre ciertos espacios que componían el “Ex Driving de Golf”. En este sector, la Asociación construirá canchas de rugby y se comprometió a construir dos canchas de fútbol nuevas. El permiso tiene vigencia por cinco años y el canon mensual que se abona es de 435.000 pesos.

 

 

 

La resistencia ciudadana

 

¿Se imaginan si en el Parque Centenario o en el Parque Lezama se cobrara una entrada para ingresar, se construyeran canchas de rugby y fútbol explotadas por privados, se instalaran circos y hubiera que pagar nuevamente una entrada para poder usar estos espacios? La verdad, resulta inconcebible que la ciudadanía porteña acepte estas agresiones a lo público en estos parques. Recordemos la gran resistencia ciudadana que hubo en ambos parques cuando el GCBA quiso enrejarlos, pudiendo hacerlo sólo en el Parque Centenario pero no en el Parque Lezama.

 

En cambio, en el Parque Sarmiento suceden estas privatizaciones que excluyen a la ciudadanía en general con total naturalidad. Recientemente, el Consejo Consultivo de la Comuna 12 junto con algunas asambleas comenzaron una campaña para recuperarlo. Entre las acciones se encuentra la presentación de una acción de amparo colectivo patrocinada por el Observatorio del Derecho a la Ciudad, la Cátedra de Ingeniería Comunitaria de la FIUBA, el IPYPP y la Defensoría de Laburantes.

 

El Parque Sarmiento es un parque público fantasma que puede volver a materializarse si recupera su verdadero carácter de acceso público, libre y gratuito, y se termina con las privatizaciones de sus espacios. Es lo que establece el derecho a un ambiente urbano sano y equilibrado, y nuestro Derecho a la Ciudad.

 

 

 

 

 

 

 

 

 

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