Las Ruinas de la Plaza Banff a un Año de su Inauguración
La Agrupación de Vecinos “Versalles de Pié”, realizó un informe acerca del estado de la Plaza “Ciudad de Bannff”, a un año de la inauguración de las nuevas obras de remodelación, y la verdad, es que el estado de la misma es “Calamitoso”, las fotos hablan por sí solas.
A continuación el informe.
Luis Alberto Serres
El 18 /09/2014 se realizó la inauguración de los juegos inclusivo de la Plaza Ciudad de Banff. Se demoró más de 1 año en la obra y se gastó más de $ 2 millones en la puesta en valor de la plaza.
El estado de la plaza y de los juegos hoy: le falta parte de las barandas de juegos, techo roto, escalera de soga rota, tenía unos palos de música no quedó ni uno, carteles (de mala calidad) se le borraron las letras, al cartel de braile ya le faltan letras, un cajón para arena que como está todo roto no tiene arena, del sube y baja solo queda la base, faltan baldosas de goma junto a la calesita donde caben los pies de los chicos. En un lugar donde los chicos se pasan la tarde entera jugando no hay bancos.
Es muy triste que la gente no cuide su propio espacio y también que «escrache» todos los bancos con la «v» de su club.
Junto a los juegos había un bebedero, del cual solamente quedó la cañería sobresalen de la tierra y que cualquier persona se puede tropezar. El único bebedero que hay esta todo el día perdiendo agua hasta la vereda. La estatua tiene una reja pero la puerta no está, por ende entran a vandalizar la estatua.
Todo este deterioro, descuido y escaso mantenimiento demuestra el pésimo material y la obra del Gobierno porteño, que es quien debe controlar la plaza y que puede hacerlo desde las cámaras de seguridad en Roma y Arregui y en Lascano y Lisboa, que supuestamente están funcionamiento.
En el reclamo de los vecinos se había destacado la presencia de un guardián de plaza, que permitiría ir controlando el uso correcto de la plaza, algo que ya se reclamó al jefe de la comuna el macrista Agustín Ferrari, delfín de Horacio Rodríguez Larreta pero que todavía estamos esperando.
Que «la puesta en valor» de la plaza no sea algo efímero para las elecciones. Es nuestro espacio verde del barrio, lugar de esparcimiento y encuentro, un patrimonio que heredamos y queremos que continúe para las próximas generaciones.
Versalles de Pié
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